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Introducción al estudios “los libros de la Biblia”
Por sus obras (La Creación) Por el Mesías (El Cristo) Las Escrituras (La Biblia) De allí su nombre en griego: “biblos” o “biblion”, que significa colección de libros. Esta terminología comenzó a utilizarse en el siglo IV, hecha por Juan Crisóstomo de Constantinopla como: “Ta Biblia” (en latín) para indicar “Lo divinamente inspirado” Fue escrita por un grupo de 40 personas (sin contar los copistas y/o auxiliares) 32 personas se encargaron del Antiguo Testamento y 8 del Nuevo Testamento. Estas personas vivieron a lo largo de 1500 años (En el lapso del A. T) y 100 años (en el lapso de N. T.) A pesar del tiempo transcurrido, se conoce con bastante precisión quienes fueron sus autores y cuándo se escribió cada libro. Lo impactante para los eruditos es el concepto de “unidad” incuestionable, que mantiene desde su comienzo hasta el fin: a pesar de haber transcurrido tanto tiempo en su elaboración y con personas tan diferentes una de otra. Precisamente por este criterio de “unidad” decimos que: “La Biblia NO CONTIENE La Palabra de Dios, la Biblia Es La Palabra de Dios” Se comenzó a escribir en el desierto de Arabia, con un hombre llamado Moisés, y se terminó de escribir en la Isla de Patmos, con un hombre llamado Juan. Fue escrita en hebreo (hebreo cuadrado); en griego y algunas porciones en arameo Como bien sabemos, la Biblia se divide en dos bloques, lo que conocemos como Nuevo Testamento y Antiguo Testamento. El Antiguo testamento en hebreo es el Tanaj del pueblo de Israel. Relata la historia de esta nación y las promesas de Dios para con ella. El nuevo testamento, es la historia del cumplimiento de esas promesas, por medio del Hijo de Dios, nuestro Señor Jesucristo. La palabra “testamento” no es hebrea, sino que viene del griego: “Testamemtum” o “Testamentus” que significa “pacto” o “alianza” Para el pueblo judío es “el libro del pacto y la alianza”, No reconoce un “Nuevo Pacto” o un “Viejo Pacto”, porque para ellos hay uno solo: el que Dios hizo a Abraham. Jer 33:25 Así ha dicho Jehová: Si no permanece mi pacto con el día y la noche, si yo no he puesto las leyes del cielo y la tierra, Entre el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento, hay un período de silencio, durante el cual el Pueblo de Israel, no tuvo profeta que le trajera el mensaje revelado del Altísimo. A ese período se lo conoce como “Años de silencio”. El Antiguo Pacto, concluye con la aparición del profeta Juan el Bautista, anunciando el reino de Dios. La Biblia, como dijimos, está dividida en dos grupos, A. T/ N. T. En la división hecha por los hebreos, encontramos para el Antiguo Testamento 22 Libro. En la versión latina, para el antiguo testamento encontramos 39 libros En el nuevo testamento, 27 libros. La Biblia cuenta con 1189 capítulos, más de 31000 versículos y aproximadamente 3 millones de letras. En el año 70 de nuestra era, 2 años después de la ejecución del apóstol Pablo, los ejércitos romanos entran en Jerusalem, y destruyen el 2° Templo de Salomón, quemando todos los escritos y archivos que se encontraban allí en ese momento. Por lo tanto no había un “libro sagrado” o “Biblia”, el “Antiguo Testamento” No se había formado. Diversas “Escrituras” consideradas “divinamente inspiradas” eran leídas en las diferentes sinagogas y lugares. Con la destrucción de Jerusalem, y con la dispersión de los sobrevivientes israelitas por las provincias del Imperio romano, se corría el peligro de la asimilación: que los judíos tomaran las costumbres de los diferentes pueblos y naciones, perdiendo la identidad como nación y pueblo elegido por Dios. Ante esto, un grupo de rabinos, renombrados de la época, hoy conocidos como “masoretas” (de la palabra hebrea Masoret, que significa tradición), ellos se reunieron en Jamnia, la actual Haifa en Israel, para buscar una solución a esta situación de estar sin las sagradas escrituras. En el siglo VI de nuestra era, allí se estudiaron y consideraron los libros considerados como “divinamente inspirados”; se los ordena debidamente y se confecciona una lista estructural que con el tiempo, pasa a conformar, Lo que conocemos como el “Antiguo Testamento” de la Biblia. Dicha lista, no se basó en razones filosóficas ni criterios piadosos, sino en el objetivo principal de mantener la continuidad de un pueblo, y en base a la relación con su Creador. La decisión en Haifa, simplemente confirmaba y anunciaba, en términos claros lo que había sido la práctica religiosa del pueblo de Israel durante siglos. Los rabinos “masoretas” no seleccionaron los libros del antiguo testamento; simplemente reconocieron los ya existentes y la necesidad del pueblo de leerlos como mandato divino. Al finalizar su trabajo, los “masoretas” dejaron definidas tres grandes divisiones en el A. T. En hebreo: Toráh; en Griego: Pentateuco. Jamishá jumshei Toráh: los cinco libros de la ley. profetas= neviím Profetas primeros= neviím rishonim Profetas postreros= neviím ajronim escritos= Ktuvim